Por una web sostenible.
The Green New Deal.
Primero fue la máquina de vapor, después los combustibles fósiles y ahora, internet.
Según indican algunos teóricos, estamos en plena Tercera Revolución Industrial; la del avance de las tecnologías de comunicación, la economía colaborativa, la expansión del uso de Internet y, por encima de todo, el de las energías renovables.
Si el carbón fue la fuente de energía que propició la Primera Revolución Industrial, descarbonizarnos es el reto de la Tercera.
El proceso para conseguir todo esto implica seguir digitalizando todos los sectores y desarrollar el Internet de las cosas (IoT), lo que supone un aumento exponencial tanto del tráfico de datos como de los soportes para almacenarlos y procesarlos.
En este camino hacia un nuevo escenario económico, se nos plantea un reto: crear nuevos sistemas de comunicación más eficientes y optimizados que hagan posible un uso sostenible de los recursos naturales.
En Hacce ponemos nuestros esfuerzos en 4 líneas:
Hosting verde
El principal recurso que consumen los servidores y centros de datos es electricidad. En HACCE utilizamos solo datacenters alimentados de energías ecológicas 100 % renovables.
Puedes comprobar si tu alojamiento web es verde aquí.
01.
Reducir la transferencia de datos
– Diseñamos una arquitectura de información centrada en el usuario. Así optimizamos su navegación con rutas de contenido más claras que faciliten que alcance sus objetivos en menos tiempo.
– Reducimos el peso de los distintos elementos que componen la web: imágenes, archivos, vídeos, descargables, etc. Y utilizamos sistema de caches y CDNs para acercar los contenidos al usuario y que los datos necesiten rutas más cortas.
02.
Almacenamiento de datos
También optimizamos los archivos en el servidor para lograr un mejor uso de los recursos de almacenamiento y tener menos necesidades energéticas.
03.
Instalaciones
Nos esforzamos en mejorar todos los procesos internos y el consumo energético de nuestras oficinas.
Además, en la medida de lo posible, reducimos los desplazamientos innecesarios fomentando las reuniones deslocalizadas o el teletrabajo.
04.
Nos toca compensar
Y -como sabemos que todos los esfuerzos por reducción y optimización no son suficientes pero sí necesarios- generamos acciones como ésta, que internamente llamamos “los arbolitos” y nos tiene verdaderamente ilusionados, repartiendo turnos de riego, haciendo seguimiento a los arbolitos que más crecen o discutiendo por qué algunas hojas se ponen amarillas. ¿Falta de hierro?
Queremos pensar que esto no solo va a ayudar a compensar la Huella de Carbono de nuestro trabajo, de nuestras webs, sino que es un compromiso común, algo que asumimos juntos. Uno más en la lista de los ya adquiridos y de los que seguro, nos queda por tomar.
¿Hacemos juntos una web más sostenible?
…y lo hemos hecho
Desde 2020, que decidimos lanzarnos con este proyecto, suceden todo tipo de casuísticas, de las cuales seguimos aprendiendo e intentando salir reforzados para continuarlo hasta hoy en día.
Pero…¿Cuál es la idea?
La idea es muy sencilla: por cada cliente que confía en nosotros para crear su web, plantaremos un carballo en una zona rural de nuestra región.
De esta forma , contribuimos a reforestar el territorio, a capturar el CO2 de la atmósfera y a crear un entorno más verde y saludable.
Uno de los primeros pasos que dimos consistió en desplazarnos a una carballeira y realizar una recogida selectiva de las primeras bellotas del año. Ya en la oficina, procedimos a mantenerlas en las condiciones óptimas de humedad y, pasados unos días, las plantamos en semilleros.
Con mucho mimo, paciencia y cuidados, germinaron en nuestras oficinas. El carballo es una planta dura en su fase inicial, pero tiene que tener sus condiciones para un buen desarrollo. Entre todos los miembros de Hacce, logramos que las bellotas crecieran y se convirtieran en pequeños árboles que, más tarde, serían plantados.
Y por fin llegó el momento
En marzo de 2023 conseguimos plantarlas en un monte comunal de la zona de Cangas. Zona en la que los propios vecinos están concienciados con el medio ambiente, colaborando en la extinción de árboles no autóctonos y poco beneficiosos y apostando por la reforestación de especies autóctonas.
Conseguimos cerrar esta primera etapa, fue un proyecto ilusionante que nos llenó de energía y motivación esquivando las dificultades surgidas por el camino.
Seguimos adelante con nuestra pequeña aportación para crear un mundo más verde y sostenible.